¿Sabías que con todo el carburante que se ha repostado mal se podría dar 1.209 vueltas al mundo? Actualmente es más común de lo que parece que alguien se equivoque a la hora de repostar y llene el depósito de su coche con un carburante que no le corresponde. Sobre todo a la hora de repostar con gasolina en el depósito de un coche diésel, debido a que el boquerel de la manguera cabe al ser más fino. La RACE estipula que más de 72.000 conductores cometen este error cada año.
Primero, dejemos claro que si el error es 100% tuyo, no habrá seguro que te pueda proteger de tal suceso. Lo que sí cubre el seguro de Toyota en estos casos es la asistencia, para que no te quedes tirado en la carretera. Tanto si te das cuenta antes de arrancar como si arrancas y a los pocos metros se detiene, el seguro cubrirá el traslado al taller.
En Toyota te garantizamos el traslado del vehículo al taller oficial más cercano donde evaluarán la avería y propondrán las soluciones oportunas. Así mismo el cliente tendrá acceso al resto de servicios habituales que incluye la asistencia en carretera.
La respuesta dependerá de las diferentes situaciones que se pueden dar. En primer lugar, si has errado tú y te has dado cuenta en el momento, en ningún caso enciendas el motor. Avisa al encargado de la estación de servicio para que corte el tráfico en la estación y llama a un profesional para que siga el protocolo pertinente.
De esta forma el vehículo se verá mínimamente afectado. Es importante que el arreglo lo haga un profesional ya que si no tienes experiencia puedes provocar un incendio involuntario, ya que se requieren ciertas medidas de seguridad como ropa y guantes especiales, balizar la zona y seguir un estricto protocolo.
Puesto que quedarte sin vehículo por un error tan absurdo es un incordio, Toyota te ofrece un servicio de vehículo de sustitución para que no te quedes tirado mientras arreglan tu coche. De esta forma puedes estar más tranquilo si repentinamente tienes un contratiempo como este.
El verdadero problema viene cuando no te has percatado del error y arrancas. Aquí el alcance del daño será proporcional a la cantidad errónea que se ha vertido en el depósito. Si se ha llenado más de un cuarto del depósito con el carburante erróneo, el daño será muy grave, pero no tiene por qué ser definitivo. En cambio, si el vertido ha sido leve lo más probable es que tan solo veas humo blanco salir del tubo de escape.
Para detectar este fallo como hemos dicho nos fijaremos en el tubo de escape, pero también debemos tener en cuenta que si el coche da tirones continuados o se para, el daño puede ser grave. Así que lo primordial es parar y llamar a asistencia en carretera para evitar males mayores.
La cosa cambia si es un empleado de la estación de servicio el responsable del daño que ha sufrido tu querido coche. La ley obliga a la empresa a indemnizarte para cubrir los gastos del taller. Estos daños irán de la misma forma que en el caso de que el error sea tuyo, importará mucho el momento en que te des cuenta del fallo y lo remedies.
Para demostrar el suceso deberás conservar el ticket de la transacción y un informe pericial del taller. De esta forma podrás acudir a consumo o proceder a un arbitraje si las dos partes están de acuerdo, en caso contrario podrás agotar la vía judicial.
Ahora que ya sabes que este fallo no es ninguna minucia, recuerda estar atento a la hora de repostar. Las prisas o el despiste nos pueden salir caros, sobre todo si no contamos con un seguro de coche Premium como el de Toyota.
No lo dudes, consulta sus condiciones y contrata el mejor seguro para tu Toyota.
