El transporte terrestre se encarga de movilizar hasta el 90% de las mercancías que se desplazan por nuestro país. El transporte de mercancías perecederas es uno de los más vigilados y legislados por los posibles peligros que implica para la salud. En la actualidad existen diferentes tipos de vehículos para el transporte de mercancías a temperatura regulada, comúnmente denominados vehículos ATP.
En función de las características de autorización para el transporte de perecederos los vehículos se clasifican en:
- Isotermo: Vehículo con caja aislada del exterior en paneles, puertas, suelo y techo que asegure un mínimo intercambio de calor entre el exterior y el interior.
- Refrigerado: Es aquel cuya caja, debidamente aislada, dispone de una fuente de frío no mecánica que sea capaz de bajar la temperatura del habitáculo y mantenerla con una temperatura exterior media de 30ºC y pudiendo llegar a los -20ºC en función del tipo de vehículo refrigerado que se trate.
- Frigorífico: Vehículo con caja isoterma provista de una máquina de frío que puede bajar la temperatura interior en un intervalo entre los 12 y los -20ºC para posteriormente mantener dicha temperatura.
- Calorífico: Vehículo con caja isoterma provista de una máquina de calor que es capaz de asegurar y mantener la temperatura seleccionada durante 12 horas y siempre por encima de los 12ºC.