Qué prefieres: ¿aire acondicionado o ventanillas bajadas? La pregunta puede parecer demasiado evidente y sencilla de responder, pero en verano cuesta decidir qué método penaliza menos el consumo de tu Toyota. A pesar de que todos nuestros modelos cuentan con una buena aerodinámica, hay ventajas e inconvenientes según qué opción prefieres para sobrellevar el intenso calor veraniego.
En este artículo podrás ver las ventajas de cada opción, así como los posibles inconvenientes que tiene cada una de ellas. La penalización principal recaerá sobre el consumo, aunque no es el único “pero” que puedes encontrar cuando planeas un viaje largo. En el equilibrio encontrarás la mejor opción para tu coche.
“¡Tenemos calor!”. Tan fácil como un click y el cristal descenderá para que el habitáculo del coche empiece a estar más fresco. Menos agobio, un poco de corriente dependiendo de la velocidad y listo. Aliviará a tus acompañantes y la concentración de calor disminuirá considerablemente sin penalizar, a priori, el consumo del coche.
Entre los posibles inconvenientes, veamos algunos ejemplos. El primero de ellos es la resistencia aerodinámica que se genera al abrir las ventanillas. La resistencia al aire hace que tu vehículo, a determinadas velocidades, pueda consumir más combustible. Además, ante episodios de alta contaminación durante el verano (falta de lluvia, excesivo calor, etc), se recomienda llevar las ventanillas cerradas para evitar respirar partículas tóxicas. Otro de los consejos es dejarlas abiertas antes de poner el aire acondicionado, ya que el calor del interior empezará a disiparse solo.
Una velocidad constante entre 70-90 km/h es la más aconsejable para llevar las ventanillas abiertas. Aunque, si sufres alergias fuertes, lo que menos te conviene es llevar una ventanilla abierta. Te expones a desencadenar una sucesión de síntomas que afectarán a tu conducción. Si circulas por autopista o autovía, no es recomendable que estén abiertas a la mitad por el riesgo que implicaría ante un accidente. O completamente abiertas o cerradas, pero no a la mitad.
Dejar que el aire pase por las ventanas ya no es suficiente, pues la temperatura es alta fuera y no merece la pena. “¿Puedes poner el aire, por favor?”. ¡Click! Encendido en un segundo. El aire acondicionado es un gran aliado en momentos tan complicados como coger el coche después de haber estado al sol varias horas.
El aire acondicionado refresca el interior del coche sin hacer que pierda prestaciones aerodinámicas. Los inconvenientes se presentan a la hora de acelerar o subir alguna rampa, cuando el motor sufre un poco más, en el caso de un coche con cambio manual.
Nuestros modelos Toyota cuentan con un sistema de climatización automática que regulará la temperatura e intensidad del aire en función de lo necesario para garantizar una conducción cómoda y sin agobios. El calor dejará de ser un enemigo y el consumo de gasolina no se disparará tanto gracias a la combinación con nuestra tecnología híbrida.
Con todas las alternativas sobre la mesa, ya tienes la información suficiente para conducir con más cuidado en días de intenso calor. Evita dejar tu vehículo a pleno sol los días más calurosos e instala alguna cortinilla protectora en las ventanillas traseras si llevas niños contigo.
El climatizador automático adapta la intensidad y temperatura del aire para evitar altos consumos. Es la opción que menos penaliza la aerodinámica de tu vehículo y la más segura según la vía por la que circules.
