La gran diferencia entre un neumático normal y un neumático run-flat es que este tiene un refuerzo que te permitirá seguir circulando cuando se produce un pinchazo durante una cierta distancia (normalmente 80-100 kilómetros, aunque los hay que aguantan hasta 250 km) y a una velocidad determinada (también como máximo, normalmente, a 80 km/h).