Cuando conducimos, tenemos los cinco sentidos activados, sobre todo el de la vista. Los ojos pueden revelarnos mucho sobre el comportamiento de los conductores que nos rodean. ¿Por qué ese baila en el asiento mientras espera a que el semáforo se ponga en verde? ¿O por qué ese coche acelera como si corriese un rally a lo Carlos Sainz?
La vista puede ser un buen aliado para el conductor en situaciones de estrés tales como un atasco eterno, o esperando en un semáforo. El ruido de nuestro propio vehículo también puede influir en el aumento del agobio al volante, cosa que con un híbrido no sucede.
Desde Toyota os animamos a realizar este divertido juego de quién es quién al volante en la carretera. Evitarás la monotonía al conducir y, de paso, podrás anticipar las reacciones de los coches que te rodean (algo a lo que ya te ayuda Toyota Safety Sense, si tu coche lo incorpora).
1. El novato. Detectado a lo lejos por la enorme L blanca sobre fondo verde que adornará su coche durante un año, o por los “pegotes” de la luna trasera que indican que su placa de “novel” se ha “caído”. Ante sus primeras salidas en solitario estará nervioso y emocionado, más de una vez pondrá el intermitente antes de tiempo y se comerá algún ceda el paso. Algo brusco con los pedales y los frenazos. Toyota AYGO.